Los mejores poemas de Gustavo Adolfo Becquer


Volverán las oscuras golondrinas


Volverán las oscuras golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar,
y otra vez con el ala a sus cristales
jugando llamarán.

Pero aquellas que el vuelo refrenaban
tu hermosura y mi dicha a contemplar,
aquellas que aprendieron nuestros nombres...
ésas... ¡no volverán!

Volverán las tupidas madreselvas
de tu jardín las tapias a escalar,
y otra vez a la tarde aún más hermosas
sus flores se abrirán.

Pero aquellas cuajadas de rocío
cuyas gotas mirábamos temblar
y caer como lágrimas del día...
ésas... ¡no volverán!

Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar;
 tu corazón de su profundo sueño
 tal vez despertará.

Pero mudo y absorto y de rodillas,
como se adora a Dios ante su altar,
como yo te he querido... desengáñate,
¡ así no te querrán. !




¿Quién se acordará?


Al ver mis horas de fiebre
e insomnio lentas pasar,
a la orilla de mi lecho, ¿quién se sentará?
Cuando la trémula mano tienda, próximo a expirar,
buscando una mano amiga,
¿quién la estrechará?

Cuando la muerte vidríe
de mis ojos el cristal,
mis párpados aún abiertos,
¿quién los cerrará?

Cuando la campana suene
(si suena en mi funeral)
una oración, al oírla,
¿quién murmurará?

Cuando mis pálidos restos
oprima la tierra ya,
sobre la olvidada fosa,
¿quién vendrá a llorar?

¿Quién en fin, al otro día,
cuando el sol vuelva a brillar,
de que pasé por el mundo
quién se acordará?



¡Habrá poesía!



¡No digáis que, agotado su tesoro
De asuntos falta, enmudeció la lira!
Podrá no haber poetas; pero siempre
Habrá poesía;

Mientras las ondas de la luz al beso
Palpiten encendidas;
Mientras el sol las desgarradas nubes
De fuego y oro vista;

Mientras el aire en su regazo lleve
Perfumes y armonías;
Mientras haya en el mundo primavera,
¡Habrá poesía!

Mientras la ciencia a descubrir no alcance
Las fuentes de la vida,
Y en el mar o en el cielo haya un abismo
Que al cálculo resista;

Mientras la humanidad siempre avanzando,
No sepa a dó camina;
Mientras haya un misterio para el hombre,
¡Habrá poesía!

Mientras sintamos que se alegra el alma
Sin que los labios rían;
Mientras se llora sin que el llanto acuda
A nublar la pupila;

Mientras el corazón y la cabeza
Batallando prosigan;
Mientras haya esperanzas y recuerdos,
¡Habrá poesía!

Mientras haya unos ojos que reflejen
Los ojos que los miran;
Mientras responda el labio suspirando
Al labio que suspira;

Mientras sentirse puedan en un beso
Dos almas confundidas;
Mientras exista una mujer hermosa,
¡Habrá poesía!



Eso son nuestras dos almas



Dos rojas lenguas de fuego
que a un mismo tronco enlazadas
se aproximan, y al besarse
forman una sola llama.

Dos notas que del laúd
a un tiempo la mano arranca,
y en el espacio se encuentran
y armoniosas se abrazan.

Dos olas que vienen juntas
a morir sobre una playa
y que al romper se coronan
con un penacho de plata.

Dos jirones de vapor
que del lago se levantan,
y al reunirse en el cielo
forman una nube blanca.

Dos ideas que al par brotan,
dos besos que a un tiempo estallan,
dos ecos que se confunden,
eso son nuestras dos almas.





Yo que no siento ya todo lo sé



Yo sé cuál el objeto
De tus suspiros es;
Yo conozco la causa de tu dulce
Secreta languidez.
¿Te ríes?... Algún día
Sabrás, niña, por qué.
Tú acaso lo sospechas,
y yo lo sé.

Yo sé lo que tú sueñas,
Y lo que en sueños ves,
Como en un libro puedo lo que callas
En tu frente leer.
¿Te ríes?... Algún día
Sabrás, niña, por qué.
Tú acaso lo sospechas,
y yo lo sé.

Yo sé por qué sonríes
Y lloras a la vez:
Yo penetro en los senos misteriosos
De tu alma de mujer.
¿Te ríes?... Algún día
Sabrás, niña, por qué.
Mientras tú sientes mucho y nada sabes,
 Yo, que no siento ya, todo lo sé.

 Gustavo Adolfo  Becquer

1 comentario :

  1. Fúe un profundo Enamorado ..muy observador de las cosas del cual se siente pero se calla..."el alma enamorado"F. Daniel Ramírez.

    ResponderEliminar