Tumbas
Sobre las ruinas de un viejo monasterio
se alzan las tumbas de un nuevo cementerio.
Tumbas por aquí, tumbas por allá.
Tumbas, tumbas… Uhá ha ha ha há.
Dos de noviembre día de difuntos
salen a pasear los muertos todos juntos.
Muertos por aquí, muertos por allá
muertos, muertos… Uhá ha ha ha há.
Los esqueletos juegan un partido
con la cabeza de un recién fallecido
Cabezas por aquí, cabezas por allá
Cabezas, cabezas… Uhá ha ha ha há.
Cae la noche sobre el campamento
sombras asesinas acechan al momento.
Sombras por aquí, sombras por allá.
Sombras, sombras… Uhá ha ha ha há.
Sobre las ruinas de un viejo monasterio
se alzan las tumbas de un nuevo cementerio.
Tumbas por aquí, tumbas por allá.
Tumbas, tumbas… Uhá ha ha ha há.
Dos de noviembre día de difuntos
salen a pasear los muertos todos juntos.
Muertos por aquí, muertos por allá
muertos, muertos… Uhá ha ha ha há.
Los esqueletos juegan un partido
con la cabeza de un recién fallecido
Cabezas por aquí, cabezas por allá
Cabezas, cabezas… Uhá ha ha ha há.
Cae la noche sobre el campamento
sombras asesinas acechan al momento.
Sombras por aquí, sombras por allá.
Sombras, sombras… Uhá ha ha ha há.
¡Hola madrecita venimos a pedir la calavera
Cantamos o no cantamos!
¿CANTAMOS?
Si no salían las personas donde se les tocaba, se les gritaba:
¡Que no se cosan sus tamales!
Cantamos o no cantamos!
¿CANTAMOS?
Si no salían las personas donde se les tocaba, se les gritaba:
¡Que no se cosan sus tamales!
Más canciones y los festejos en Xochimilco
Veintidós años viviendo en Xochimilco, esa delegación llena de tradiciones y costumbres, no muy apegada a las ciudades modernas, donde se matan las costumbres. Todavía están esos recuerdos vivos, cuando salíamos a las calles a pedir la calavera, llenos de entusiasmo como muchas de las fiestas que en ese lugar se celebran: las posadas en el barrio, el día de la virgen de dolores de Xaltocán, las quermeses del día del niño que organizaban la personas de otros barrios, las fiestas de los pueblos; esos festejos que nos manda Dios para ser más a meno la vida y entretenida .
El día de muertos era una de las fechas especiales que esperábamos con impaciencia, preparábamos nuestra chilacayotes en forma de calavera; dentro de esta: una vela (esa luz que alumbra el camino de vivos y muertos), algunas veces se hacían con una caja de zapatos.
Por fin recorríamos las calles, ya el sol ocultándose en los edificios, con los pocos árboles que tienen una ciudad. Esos hermosos callejones que cuenta el centro de Xochimilco, infinidad de niños se escuchaban cantando -¡ahí viene la chilindrina a pedir su mandarina!-, ese grito de la - ¡la calavera!-, era lo que más entusiasmaba, pero, lo primero que se nos dijo, sobre el respeto hacia los muertos que se habían adelantado, era la oración del padre nuestro; era lo primero que se debía cantar en esos días de fiesta.
Padre nuestro que estás en el cielo,
Santificado sea tu Nombre;
Venga a nosotros tu Reino;
Hágase tu voluntad
En la tierra como en el cielo.
Danos hoy
Nuestro pan de cada día;
Perdona nuestras ofensas,
Como también nosotros perdonamos
A los que nos ofenden;
No nos dejes caer en la tentación,
Y líbranos del mal. Amén.
Santificado sea tu Nombre;
Venga a nosotros tu Reino;
Hágase tu voluntad
En la tierra como en el cielo.
Danos hoy
Nuestro pan de cada día;
Perdona nuestras ofensas,
Como también nosotros perdonamos
A los que nos ofenden;
No nos dejes caer en la tentación,
Y líbranos del mal. Amén.
Después de haber terminado de rezar cantábamos las pocas canciones que no sabíamos:
Ahí viene la chilindrina,
a pedir su mandarina
Ya llego el chavo del ocho,
a pedir su biscocho
Ya llego pancho pantera,
a pedir la calavera
Ya llego Jorge negrete,
a pedir su mollete
Ya llegaron los abuelitos,
a pedir sus tamalitos
Con los huesos de mi abuela
voy hacer una escalera
Y subir a la azotea
y gritar: la CALAVERA
¡La CALAVERA !
También cantábamos una versión de Pedro Infante de la canción, "Las otras Mañanitas":a pedir su mandarina
Ya llego el chavo del ocho,
a pedir su biscocho
Ya llego pancho pantera,
a pedir la calavera
Ya llego Jorge negrete,
a pedir su mollete
Ya llegaron los abuelitos,
a pedir sus tamalitos
Con los huesos de mi abuela
voy hacer una escalera
Y subir a la azotea
y gritar: la CALAVERA
¡La CALAVERA !
¡De tanto cantar y cantar
ya me duele la garganta
porque aquí no saben dar
esa aguita que ataranta!
ya me duele la garganta
porque aquí no saben dar
esa aguita que ataranta!
A veces salían a darnos dulces, frutas o pan, en ocasiones simplemente no salían a recibirnos, los que estaban más apegados a las tradiciones, nos invitaban a pasar al altar, en las ofrendas, teníamos que rezar y cantar:
Cuando el reloj Marca la una:
las calaveras comen sus tunas
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las dos:
Las calaveras les dan tos /(comen su arroz)
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las tres:
Las calaveras se van en su tren /(bailan al reves)
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las cuatro:
Las calaveras se van a su cuarto /(juegan un rato)
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las cinco:
Las calaveras pegan de brincos
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las seis:
Las calaveras les huelen sus pies
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las siete:
Las calaveras se les caen los dientes
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las ocho:
Las calaveras comen su bizcocho
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las nueve:
Las calaveras toman su nieve
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las diez
Las calaveras juegan ajedrez
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca once las calaveras:
Les da por un romance
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las doce:
Las calaveras pasean en su coche.
Chumbala, cachubala, cachumba la
las calaveras comen sus tunas
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las dos:
Las calaveras les dan tos /(comen su arroz)
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las tres:
Las calaveras se van en su tren /(bailan al reves)
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las cuatro:
Las calaveras se van a su cuarto /(juegan un rato)
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las cinco:
Las calaveras pegan de brincos
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las seis:
Las calaveras les huelen sus pies
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las siete:
Las calaveras se les caen los dientes
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las ocho:
Las calaveras comen su bizcocho
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las nueve:
Las calaveras toman su nieve
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las diez
Las calaveras juegan ajedrez
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca once las calaveras:
Les da por un romance
Chumbala, cachubala, cachumba la
Cuando el reloj marca las doce:
Las calaveras pasean en su coche.
Chumbala, cachubala, cachumba la
Festejos y disfraces para el Día de Muertos en La Delegación Coyoacán
Cuan querido es nuestro México con sus costumbres, donde se celebra estas fechas tan esperadas para brindar honores a los que estuvieron con nosotros, que dejaron una canción grabado en nuestras memorias. Recordándolos con los alimentos que les gustaban, con el vino o el agua que tomaban, las veladoras con que se alumbran a los muertos, durante el trayecto, el cempasúchil (la flor de muerto)que no podía faltar en los altares, en las ofrendas.
En muchas partes de México se escucha y se ve esta tradicion, en una de las mas importantes por mencionar en el Distrito Federal, es en la Delegación Coyoacán, donde la gente se ve rodeada de diversos disfraces, muy extravagantes, donde la gente se le permite tomar fotos con las personas que están disfrazadas.
Es lo más original! A lo que se pedía antes. Felicidades
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